¿Las conservas son saludables?

Sabemos que pueden sacarnos de muchos apuros cuando no hemos hecho la compra, que son la mejor alternativa para los viajes y que últimamente se han puesto de moda como alimento gourmet ya que ofrecen muchísimas posibilidades para crear platos únicos pero, ¿son realmente saludables las conservas? Nuestros expertos te responden a continuación presentándote todas las características nutricionales y de salud que tienen las conservas.

¿Son saludables las conservas?

Las conservas son productos ideales para tenerlos en casa ya que se trata de comida preparada y bien conservada en raciones pequeñas que pueden consumirse directamente o usarse para completar otros platos equilibrados o saludables e incluso tomarse a modo de picoteo rápido y sano si nos encontramos fuera de casa. Sin duda son una gran alternativa teniendo en cuenta que el ritmo de vida actual es muy rápido y en contraposición a los precocinados, que suelen ser ultraprocesados y llevan muchos ingredientes artificiales, las conservas suelen ser saludables, sobre todo si son de calidad como las de Arroyabe, ya que sin duda son una forma muy saludable de consumir pescados azules de calidad, que son muy importantes en cualquier dieta, así como legumbres y otro tipo de alimentos similares.

Todos los expertos coinciden en que las conservas de buena calidad como los pescados azules, los mariscos, las verduras o las legumbres son totalmente necesarias para mantener una dieta equilibrada y muy saludable. Así, si sabemos elegir bien las conservas de alta calidad, sin añadir salsas ni azúcares y conservándolas siempre al natural o con aceite de oliva, sin duda las conservas son una gran alternativa para una alimentación muy variada y también saludable. Los mejillones, el atún de calidad o los berberechos son algunos ejemplos de conservas de pescado de máxima calidad que pueden ayudarnos a llevar una dieta sana (incluyéndolos en ensaladas o tomándolos directamente como picoteo o plato principal) sin tener que gastar sumas grandes de dinero, ya que normalmente este tipo de productos suelen ser costosos y es complicado encontrarlos de buena calidad.

Además, así puedes consumirlos directamente y te ahorras el tener que pensar cómo prepararlos, con lo que sin duda será mucho más fácil que puedas aportar a tu cuerpo de esta forma ácidos omega 3 y omega 6 y proteínas de buena calidad que de otra forma probablemente no consumirías por evitarte el tener que elaborar complicadas recetas ya que la disponibilidad de tiempo para la cocina de la mayoría de personas suele ser limitada.

Si cada semana se recomienda consumir entre tres y cinco raciones de pescado, las conservas en atún, por ejemplo, son un alimento totalmente natural perfecto para incluir como una o dos de las raciones semanales. Lo mejor es elegir el atún al natural para poder consumir esta proteína sin nada de aceites. Algunas ideas son combinarlo con ensaladas o incluso usarlo como relleno para unos huevos muy sanos y así cumplir con los requerimientos semanales de pescado para llevar una dieta saludable.

Las conservas vegetales son también una gran alternativa y que muchas veces no tomamos verdura o nos limitamos a la clásica ensalada de lechuga y tomate cruda porque es lo más rápido y sencillo. Como no tenemos tiempo para ponernos a hervir la verdura para cocinar diferentes platos simplemente dejamos de consumir una gran variedad de alimentos saludables y es por eso que las conservas vegetales como por ejemplo las de espinacas o las acelgas son una gran alternativa para incorporar muchos más vegetales a nuestra dieta y por tanto empezar a comer de forma mucho más saludable. Como decimos, así no tendrás la escusa de la pereza por tener que limpiar las verduras, lavarlas e incluso cocinarlas cuando no tienes tiempo e incluso la podrás incluir en diferentes recetas de tupper para llevar al trabajo o de viaje. Es una forma de consumir verdura que, como sucede con el pescado, no debería ser la única pero sin duda es una muy buena alternativa si la otra opción es no consumir nada de verdura y además nos puede ayudar a aumentar la variabilidad en nuestra dieta aunque ya seamos consumidores de vegetales y por supuesto es la mejor opción para cuando no tenemos tiempo de cocinar pero no queremos renunciar a comer sano.