Cómo hacer tu impresora más respetuosa con el medio ambiente

Cada vez somos más las personas que buscamos ser respetuosos con el medio ambiente. El objetivo es que cada vez más personas se sumen a esta moda para conseguir que el cambio climático no se produzca o tarde el máximo tiempo posible en producirse. Reciclar o usar medios de trasporte ecológicos ayuda al planeta. Pero en este artículo no nos vamos a centrar en esas medidas ecológicas, sino que vamos a ver cómo podemos usar la impresora sin dañar al medio ambiente. Para conseguirlo, te vamos a dar una serie de consejos que te serán de gran utilidad. Así podrás imprimir, teniendo en cuenta que estás dañando al mínimo a la naturaleza.

1- Imprimir a doble cara

Para evitar un excesivo consumo de papel, te recomiendo optar por imprimir a doble cara. Gracias a ese sistema podrás aprovechar mejor este recurso y en consecuencia tus documentos ocuparán menos espacio.

Por otra parte, si imprimes documentos y luego te das cuenta de que no los necesitas, es el momento de reciclar el papel. En ese caso, tienes que llevar el papel al contenedor azul para darle una segunda oportunidad. Si haces ese sencillo gesto, evitarás que se talen muchos árboles y el planeta te lo agradecerá. Son cosas muy fáciles de hacer que ayudan de manera directa al planeta.

2- Usa cartuchos compatibles

Una de las mejores opciones para conservar el medio ambiente y además ahorrar dinero en la compra de cartuchos es optar por los cartuchos compatibles. No todos las opciones que nos encontramos en el mercado son de buena calidad, siempre hay que investigar y optar por los que nos van a dar buenos resultados.

Por ejemplo, en www.a4toner.com podrás encontrar con facilidad los cartuchos compatibles con tu impresora con la ayuda de su buscador. La ventaja de esta tienda online de cartuchos de tinta es que nos permiten disfrutar de precios muy competitivos y tener la certeza de que la impresora funcionará igual de bien que con los originales. Además, son ecológicos, lo que significa que es una buena opción para las personas que piensan en el medio ambiente. Si todavía no los has probado, te invito a hacerlo. Verás que la calidad de la impresión es la misma y a cambio el precio de cada impresión será mucho más bajo.

3- Imprime en modo folleto

Te puedo asegurar que a través de este modo de impresión podrás ahorrar en tinta y en consecuencia podrás tener la certeza de que la impresión será mucho más ecológica. Es verdad que el ahorro de tinta no será muy grande, pero estarás dando un pequeño paso para reducir la contaminación del planeta. Prueba este sistema de impresión y seguramente pase a ser tu modo de impresión favorito.

4- Opta por una tipografía barata

Si no dominas el mundo de la tipografía, seguro que piensas que todas son iguales, pero no es así. Te puedo asegurar que unos tipos de tipografías consumen más que otros. Si realmente estás en plan de ahorro, te recomiendo optar por las tipografías Courier y o Garamond. Son tipos de letras muy bonitas, pero a cambio a la hora de imprimir consumen menos tinta.

Otra opción por la que puedes optar es la fuente Ecofont. Se ha demostrado que con esta variedad de tipografía se puede llegar a ahorrar hasta un 20% del consumo de tinta. El ahorro es importante, sobre todo si vas a imprimir mucho. Gracias a ese ahorro, los cartuchos de tinta te durarán mucho más tiempo y el planeta te lo agradecerá.

Para que el ahorro sea todavía mayor, personalmente te recomiendo usar fuentes de letra pequeñas y sobre todo usar las negritas lo justo. Las negritas consumen bastante más tinta que el resto de las letras, de aquí que haya que usarlas con mucha moderación dentro de la impresión. Son pequeñas medidas que te ayudarán a ahorrar tinta, es decir, estarás poniendo tu pequeño granito de arena a la hora de conservar el planeta y el medio ambiente.

5- Opta por la digitalización frente a la impresión

En ocasiones tendemos a imprimir cosas que realmente no tenemos que imprimir. Esas impresiones las vemos y luego las guardamos y no las volvemos a ver. Esto suele suceder sobre todo con las fotos, las imprimimos, las guardamos en el álbum de fotos y no las volvemos a ver. Si tienes claro que un documento o unas fotos no las vas a necesitar, te recomiendo dejarlas en modo digital.

Es una tontería imprimir cosas que realmente no son necesarias. La impresión no solo hará que el coste en tinta ascienda, sino que estarás contaminando más de lo necesario. Si me haces caso, imprime únicamente lo necesario. Así ahorrarás tinta y papel. Eso significará que estarás ayudando bastante al medio ambiente. Además, como el documento estará en modo digital, si en el futuro lo necesitas en físico, solo lo tendrás que imprimir.

6- Recicla los cartuchos

Como todo en esta vida, con el paso del tiempo los cartuchos terminan por gastarse. Para seguir imprimiendo tendrás que cambiarlos por unos nuevos. Al poder ser que sean cartuchos compatibles y ecológicos.

Cuando retires los viejos cartuchos, no los tires a la basura, recíclalos correctamente. Para reciclarlos solemos tener dos opciones. Mandarlos al fabricante para que los vuelva a reutilizar y así las materias primas usadas desciendan. O tirarlos al contenedor amarillo. Muchas personas no saben que se pueden reciclar, de aquí que los tiren directamente a la basura. El reciclaje es fundamental para reducir el consumo de materias primas y dar un poco de aire al planeta.

7- Recicla la impresora

Si notas que la impresora ya no te ofrece los resultados que buscas, puede ser un buen momento de cambiarla por una nueva. Pero cuidado, no la tires al cubo de la basura, recíclala. Solo tienes que llevarla al punto limpio más cercano y los profesionales se encargarán de dar una segunda vida a todos sus componentes. Una impresora cuenta con un gran número de piezas que se pueden utilizar. Si no reciclas tu vieja impresora, de nada habrá servicio que en los años anteriores hayas tomado medidas para salvar al medio ambiente.

Como puedes ver, hay muchas medidas que puedes realizar para ayudar al planeta. Ahora que las conoces, solo queda que las pongas en práctica.