Baja por enfermedad común: todo lo que necesitas saber
Las enfermedades pueden llegar en el momento que menos lo esperamos a un empleado u organización. Si tienes problemas de salud y quieres conocer más datos acerca de la baja por enfermedad común a continuación te presentamos las principales claves que debes tener en cuenta. En este artículo analizamos en qué consiste la baja por enfermedad común y te contamos todo lo que necesitas saber sobre ella.
En qué consiste la baja por enfermedad común
Primero que nada vamos a definir qué es y en qué consiste la baja por enfermedad común. Este tipo de baja hace referencia a las contingencias, enfermedades y circunstancias que impiden a los empleados hacer su trabajo y desarrollar todas sus funciones durante un período de tiempo que variará en función de la enfermedad o del accidente.
Qué derechos tiene un trabajador con la baja por enfermedad común
La baja por enfermedad común está sujeta a unas condiciones concretas. En primer lugar este tipo de baja supone la suspensión del contrato laboral entre la empresa y el trabajador durante el tiempo en que éste se encuentre ausente de su puesto de trabajo por enfermedad o accidente. Como hemos podido conocer y revisar en bizneo.com/blog/baja-por-enfermedad-comun/, durante este período de tiempo el trabajador recibirá una prestación económica o un subsidio por derecho de parte de la empresa. Si se trata de un subsidio y la baja es por enfermedad común o accidente no laboral el trabajo tiene derecho al subsidio derivado de las contingencias comunes.
Si se trata de enfermedades como una depresión derivada de su presión en el trabajo o de un accidente laboral el empleado tendrá derecho al subsidio por contingencias profesionales. Es por ello que cabe diferenciar la baja de enfermedad común de la baja de enfermedad laboral.
Cuánto dura la baja por enfermedad común
En cuanto a su duración, cabe reseñar que la baja por enfermedad común dependerá del tipo de circunstancia de cada trabajador. Encontramos la Incapacidad Temporal, una baja por enfermedad que está sujeta a un tiempo de duración concreto y las Incapacidades Permanentes, que pueden ser parciales, totales y absolutas. En este último caso los trabajadores no podrán seguir realizando su labor con la empresa.
Una Incapacidad Temporal que sea producto de una baja médica puede tener como máximo la duración de un año, que se puede prorrogar hasta seis meses más si fuera necesario. De regular estos tiempos se encarga el Instituto Nacional de la Seguridad Social.
Además para establecer la duración de una baja por enfermedad común es fundamental revisar siempre el tipo de prestación. Ésta estará sujeta a la causa de la baja, teniendo en cuenta si es laboral o personal.
Las enfermedades comunes o accidentes no laborales se producen fuera del ámbito laboral mientras que los accidentes laborales y las enfermedades profesionales se producen en la organización o derivadas de alguna de las actividades realizadas en el horario laboral.
Cuando se consigue la baja médica se podrá empezar a percibir la prestación si se trata de enfermedades comunes mientras que si son enfermedades profesionales la baja es efectiva al día siguiente de suceder la circunstancia concreta como por ejemplo el accidente laboral.
Requisitos para conseguir una baja por enfermedad
Como explicamos más arriba, una baja por enfermedad común da derecho a los usuarios a tener acceso a un subsidio siempre que se cumpla con algunos requisitos. Primero que nada es importante que el trabajador esté afiliado a la Seguridad Social y en alta. Por otro lado, para poder percibir la prestación el trabajador tendrá que tener por lo menos 180 días cotizados en los 5 años previos a la enfermedad. Si la incapacidad temporal se ha producido por un accidente o se trata de una enfermedad derivada de la profesión no es necesario el período de cotización vigente.
Quién debe pagar el subsidio por enfermedad común
Por último se debe tener en cuenta que el subsidio por enfermedad común se valora teniendo en cuenta la base reguladora diaria del empleado. Esto se calcula dividiendo la base de cotización del trabajador del último mes entre el número de días. Además en los primeros días no corresponde subsidio sino que corren a cargo del empleado. Desde el cuarto al décimo quinto día el subsidio lo paga la empresa con un sesenta por ciento de la base reguladora. A partir del día dieciséis hasta el día veinte el subsidio lo paga la entidad gestora y también tiene que ser el sesenta por ciento de la base. Si la baja por enfermedad se prolonga más de veinte días el subsidio aumentará hasta el setenta y cuatro por ciento de la base reguladora y lo pagará la entidad gestora.
Es fundamental reseñar que teniendo en cuenta los convenios colectivos y los acuerdos particulares en cada caso esto puede cambiar y la empresa puede complementar el subsidio hasta un cierto porcentaje del salario que percibe cada empleado.