¿Hacer el amor es bueno para el corazón?


Aunque a menudo se asocia el ejercicio físico con una mejor circulación y un menor riesgo de enfermedades cardíacas, el sexo también puede desempeñar un papel significativo. La ciencia ha demostrado que hacer el amor no solo fortalece los vínculos emocionales, sino que también tiene efectos beneficiosos en la salud física.
En este artículo que hemos preparado con la colaboración del buscador pasion.net, analizamos cómo la actividad sexual impacta el corazón desde diversas perspectivas.
Impacto en la presión arterial y la salud cardiovascular
Diversos estudios han encontrado que mantener relaciones sexuales de manera regular puede contribuir a la reducción de la presión arterial. Durante el acto sexual, el cuerpo experimenta un aumento temporal del ritmo cardíaco, similar al ejercicio moderado.
Sin embargo, tras la actividad, la relajación y la liberación de endorfinas ayudan a disminuir la presión arterial, lo que reduce el riesgo de hipertensión y enfermedades cardiovasculares.
Frecuencia sexual y reducción del riesgo
Investigaciones sugieren que las personas que mantienen una vida sexual activa pueden tener un menor riesgo de sufrir ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares. Un estudio publicado en la American Journal of Cardiology reveló que los hombres que tienen relaciones sexuales al menos dos veces por semana tienen menos probabilidades de desarrollar enfermedades del corazón que aquellos con una frecuencia menor.
Aunque en las mujeres los estudios son menos concluyentes, también se han observado beneficios similares en la circulación y la salud cardiovascular, nos dicen los expertos del buscador pasion.net.
El papel de las hormonas
El acto sexual libera diversas hormonas que influyen positivamente en la salud cardiovascular. La oxitocina, conocida como la hormona del amor, promueve la relajación y reduce los niveles de estrés, un factor de riesgo clave para enfermedades cardíacas.

El aumento de endorfinas y dopamina contribuye a la sensación de bienestar y puede mejorar la calidad del sueño, lo que también es fundamental para el correcto funcionamiento del corazón.
Diferencias según edad, género y estado físico
Si bien los beneficios del sexo en la salud cardiovascular son evidentes, es importante considerar factores individuales. En personas jóvenes y sanas, los efectos positivos suelen ser más pronunciados, ya que su sistema circulatorio responde mejor al aumento del flujo sanguíneo. En los adultos mayores, mantener una vida sexual activa puede seguir siendo beneficioso, aunque es recomendable un enfoque moderado, nos aconsejan desde el buscador pasion.net.
Por otro lado, el género también influye, pues algunos estudios sugieren que los hombres podrían obtener mayores beneficios en la prevención de enfermedades cardíacas, mientras que en las mujeres el impacto puede estar más relacionado con el bienestar emocional.
¿Puede representar un riesgo?
Para quienes padecen enfermedades del corazón, la preocupación sobre si el sexo es seguro es comprensible. Aunque la actividad sexual implica un esfuerzo cardiovascular, los expertos consideran que su riesgo es similar al de subir escaleras o realizar una caminata ligera.
En la mayoría de los casos, los pacientes con enfermedades cardíacas controladas pueden mantener relaciones sexuales sin problema. Sin embargo, es recomendable consultar con un médico, especialmente si se han sufrido infartos recientes o insuficiencia cardíaca.